POR FAVOR

Seguidores

NUEVA PÁGINA

Que día es hoy? (pasa el cursor)


domingo, 3 de abril de 2011

LA ZONA NULA: ¿verdad o mentira?



En el año ‘99 comenzó a circular en el mes de diciembre, la revelación del 3er mensaje (no revelado hasta entonces por la Iglesia Católica) de la Virgen Nuestra Sra. de Fátima que hablaban de los tres días de oscuridad previos a la llegada del Cristo (*1).


Hay mucha bibliografía en Internet que habla del Cinturón de Fotones y la Zona Nula y el pasaje de nuestro sistema solar por él, haciéndose referencia también al período de oscuridad. Yo no sé astronomía. 


Sabemos que muchas veces los organismos oficiales nos cuentan o nos hacen saber lo que quieren que sepamos, lo que no, lo omiten o tergiversan. 


No tengo en mi haber conocimiento astronómico para saber si es REAL en 3D la existencia del campo fotónico o no. Tampoco me preocupa. 


Pero para fraseando los dichos de Galileo Galilei (*2) quien obligado por la Inquisición (1633) a abjurar públicamente de sus creencias sobre el movimiento de la Tierra, dijo acallando la voz: "E pur si muove" (¡Y sin embargo se mueve!). 


Yo les digo: "¡Y sin embargo la Zona Nula EXISTE!". 


No puedo decirles que exista en 3D y que las Ciencias empíricas puedan comprobar su existencia, pero, sin embargo, existe en 4D y 5D. 


Pero debemos ver esto, más allá de lo aparente de esta realidad de ilusión: cada uno deberá atravesar “su propia zona nula" a su debido tiempo en su camino de Ascensión.


Nosotros vivimos atrapados en 3D en una célula de tiempo. 


Eso nos provoca que nos creamos desconectados de Todo lo que Es y que nuestra realidad esté colmada de sudor y lágrimas sin poder abstraernos del juego laberíntico en el que aceptamos participar, pero que luego olvidamos cómo encontrar la salida del laberinto del karma. 


Esto nos mantiene conscientes únicamente en nuestro presente que es lo único que consideramos como REAL. 


Hasta tanto tomemos consciencia de que nuestro presente es sólo una ilusión y que debemos trascender el Alfa (a) y el Omega (W), el principio y el fin, el punto cero o sumidero o dicho de otra forma LA ZONA NULA, nuestra noche oscura, para recién resucitar y manifestar el Adan Kadmon, lo cual nos dará acceso al 13º Universo (el universo en formación /casi terminado), antes que este universo conocido colapse, viviremos atrapados en la ilusión de la tercera dimensión.


Actualmente nuestro planeta está llegando a su punto cero. ¿Significará esto que habrá tres noches de oscuridad y que “el sol se oscurecerá, la luna dejará de brillar, las estrellas caerán del cielo y los astros se conmoverán y entonces aparecerá en el cielo la señal del Hijo del Hombre?” (*3) o que ¿se cumplirá acaso el 3er mensaje de la Virgen de Fátima (*1)? No lo sé. 


No sé si la manifestación será física en 3D para el planeta entero. 


Lo que ahora sé con certeza es que cada uno de nosotros pasará por ese punto, antes o después pero indefectiblemente llegará a él. 


¿Cómo comprender estas palabras bíblicas, más allá del mensaje literal? Pues bien, significa que todo lo que Uds. 


hayan exaltado en su “cielo personal” antes que a Dios mismo, se desvanecerá (posición social, familia, éxito profesional, trabajo, todo lo que fuere que uno haya puesto en la cumbre, en lo más alto de su “cielo”). 


Esto provocará crisis personales, crisis de valores. 


Esto ya está ocurriendo en muchos casos a nivel personal, a nivel de comunidades pequeñas y grandes (países, como es el caso de Argentina) y más tarde ocurrirá en el mundo entero.


Esto conducirá indefectiblemente a ver materializados, los más grandes miedos que podamos tener. 


Habrá dos caminos el de la resurrección o el de la entropía. 


¿Cuáles son las herramientas con las que contamos para atravesar este punto con éxito? pues los dones del Espíritu Santo (*4) que representan en este plano la contraparte de los Seres de Luz Verdadera. 


Los dones del Espíritu Santo nos ayudan a manifestar al Adán Kadmón. 

El Adán Kadmón es un estado de conciencia que conlleva un cambio de energía que abre las frecuencias de los cielos superiores a las especies en evolución de raíz adámica (no es el título de un curso), el Verdadero Pueblo de Israel. 


Es la clave para trascender el Alfa y el Omega de la mano de Sananda y empezar una nueva escalada en los Cielos Superiores.


Atravesar el punto cero, es un nuevo nacimiento a un nuevo estado de conciencia, donde todo a lo que hemos dado importancia la pierde disolviéndose en un conocimiento mayor al tomar conciencia de nuestro Eterno Presente. 


(Por ejemplo: Que nuestros hijos han sido nuestros padres, que esa pareja que me hizo sufrir fue mi asesino, etc, etc.) que todos seguimos un fin común en la evolución y que el “maquillaje” actual no tiene importancia, nada la tiene más allá de la evolución del Alma por el camino señalado por el Cristo y que de acuerdo a nuestra creencia, su Madre (la Virgen María), nos señala el camino hacia su Hijo. 


El nos espera del otro lado del Alfa y el Omega para conducirnos al Padre.


Así como él se sumergió durante tres días de oscuridad (por su descenso a los reinos de la muerte de la que no había regreso hasta su resurrección) que precedieron a su glorificación. 


Así, deberemos transitar nosotros Su Camino.


El lo dijo: “no será mejor tratado el Maestro que el discípulo”.



Hay cuatro elementos en esta fórmula, casi matemáticos si se quiere: el Alfa, el Omega, el Cristo (Sananda) y la rueda kármica.



¿Sabían Uds. que esta fórmula está grabada en el cirio pascual del culto católico? 


Para los que no profesan este credo, les explico que el cirio pascual (*5) es una vela grande que se halla al costado del altar y que se ritualiza en Sábado de Gloria (Semana Santa).


Este es el tercer día de oscuridad luego del Jueves y el Viernes Santo, previo a la resurrección del Cristo en Domingo de Pascua. Allí se encuentra grabada esta fórmula. 


En el devenir del ritual a través de siglos, la Iglesia Católica, ha olvidado el por qué de determinados símbolos o bien le ha dado una explicación que no da la clave para la salida que el Cristo evidentemente dejó a sus Apóstoles.


Para mí fue una gran revelación el comprender que la Iglesia siempre supo del pasaje por la zona nula. 


En el cirio está grabada la cruz de San Andrés (así lo explica la Iglesia), pero en realidad es la sección de dos zonas cónicas que se interceptan en un punto y que representan la bipolaridad del universo de los antiguos vectores que colapsan -con las nueve zonas de tiempo- (cono inferior) y el nuevo universo (cono superior).


Como raza adámica ya hemos pasado muchas veces por puntos cero que los Elohim recrean para nuestra evolución. 


Esta ascensión fue retrasada por la intercepción de los códigos de luz por la simiente de luz caída y que retrasó el plan de la Shekinah. 


La importancia radical de este ciclo es que la Tierra también atraviesa por el suyo. 


Una de las claves principales es trabajar los miedos. No se pasa el alfa y el omega con cargas. 


"Es más fácil que pase un camello por el ojo de una aguja, que un rico entre en el Reino de los Cielos". 


Jesús no se refería sólo a las riquezas materiales (ellas nos sirven para nuestro confort, la cuestión es si las dejaríamos sin mirar atrás cuando llegue el momento. 


Si es así, si fuésemos capaces de dejarlas sin que nos pesase, disfrutémoslas mientras existan).


Todos cargamos con creencias, no sólo propias, sino de las comunidades en que vivimos, cargamos con experiencias negativas que lastimaron a nuestra Alma grabándose en su energía, a lo largo de encarnaciones y sin ir tan lejos, cargamos con los miedos de nuestra madre desde el vientre. 


Se acabó el tiempo. Debemos hacer este trabajo lo más rápido que nos sea posible.


La negatividad de nuestro universo local es tan abrumadora que si no tuviéramos la ayuda de los Seres de Luz Verdadera, nos perderíamos todos en la entropía (proceso de degradación de la materia, involución) por confundir el reflejo de un fuego fatuo con la Luz Verdadera. 


Como una mariposa de la noche que quema sus alas en contacto con una bombilla eléctrica confundiéndola con la luz del sol.


¿Qué ocurriría si no pasamos por el punto cero, la Zona Nula? Pues regresaríamos “en condiciones normales” a la rueda kármica, pero lo que ocurre en este momento especial, es que la rueda misma a nivel planetario, debe ascender, para lograrlo, 144.000 maestros (¿la masa crítica?) deben ascender al Oficio del Cristo, por vibración, la simiente adámica ascendería.


Este es sólo un breve resumen conceptual. Hay mucho más sobre la clave para atravesar esta zona. 


Pero este conocimiento debe llegar por revelación personal o por vibración por contacto con Seres de Luz Verdadera. 


Imaginen que es como abrir una puerta de una bóveda de seguridad que únicamente dando un “tono” de sonido y luz específico se abre. 


No lo podría transferir por mail. La aceleración planetaria nos impulsa hacia esa puerta (punto cero), cuando lleguemos ante ella por la velocidad que traemos, debe abrirse ante nosotros por vibración, si eso no ocurriera, nos podríamos estrellar (esto se traduciría en el fenómeno de entropía, deterioro de la materia –ciclo de reencarnación). Sólo el miedo a chocar puede detenernos. 


Si no tememos, tenemos FE (Fruto del Espíritu Santo) y decimos con el corazón de niño “Abrete sésamo” (y lo creemos) la puerta se abrirá ante nosotros, la ilusión se disolverá, manifestaremos al Cuerpo de Luz y el Maestro Jesús Sananda, vendrá hacia nosotros.


Agradezco infinitamente a la Gracia Divina, a mis guías y a Todo lo que Es y a todos Uds. 


por estar de ese lado, que Dios los bendiga y los ilumine para encontrar la salida de su propio laberinto.
Con Amor Incondicional


Brinda Mair
Aporte: Deihanna

No hay comentarios:

Publicar un comentario